Lucy

Maggy, una joven de 18 años que acaba de ser madre, oscila entre la despedida de la adolescencia y la seriedad de la vida adulta. Junto a su hija pequeña Lucy, ella buscará una felicidad familiar de la que ella misma solo tiene una idea aproximada.
Lucy es el segundo largometraje de Henner Winckler –después de School Trip– rodado en Super 16. Se estrenó mundialmente en la sección Forum del Festival Internacional de Cine de Berlín en 2006. La película retrata la vida de una madre adolescente que conoce a Gordon, un  hombre un poco mayor que ella, y cuyo mundo de experiencias se mueve entre el final de la infancia y los inicios de la vida adulta. 

En su mayor parte, los personajes de Winckler hablan poco, no están orientados a la protesta, parecen más absortos en sí mismos, perdidos en sus pensamientos y con un mero acceso a vagas ideas sobre la vida. La trama, a modo de extracto, se desarrolla principalmente en espacios interiores. En Lucy, Winckler muestra una sección de la vida de su protagonista en la que su psicología tiende a alejarse en la distancia. No existe información detallada sobre los antecedentes y explicaciones acerca de las motivaciones de la acción, rasgo distintivo de otras películas asociadas con la Escuela de Berlín. El antes y el después no se manifiestan en el guión; surgen mucho más en la mente del espectador y liberan a los personajes de lastres estereotipados: medios dramáticamente desacelerados con los que Winckler sabe iluminarlos a profundidad.